El vidrio lacado es una lámina de cristal incolora al que se le aplica un recubrimiento de laca en una de sus caras. La cara pintada se ubica del lado de la pared luciendo el color como fondo, y ofreciendo todo el brillo y la transparencia hacia el frente, aparentando ser un vidrio coloreado.
En ocasiones el vidrio lacado posee una delgada pelicula de propileno en el lado opuesto del vidrio, que durante la eventual rotura del cristal, retiene los restos para evitar accidentes.
En DECOVIR disponemos de distintas gamas o acabados, pudiéndolos encontrar de acabado brillante, y mate o satinado logrados con el uso de vidrios esmerilados. El vidrio lacado refleja parte de la luz que absorbe, tal como si fuera un espejo, creando de esta manera espacios visualmente mas amplios y luminosos.